Pensamiento Suelto.
¿Qué sabe uno del futuro? creo que nada, aun mas hoy creo menos en el futuro solo el presente está, puedo sentirlo, así es; y el pasado solo me trae una nostalgia por el recuerdo de las cosas buenas que vivimos y es lo interesante del pasado que puedo solo recordar lo que quiero y podemos olvidar y jamás recordar lo que nos hizo daño. Este comentario suelto es para que no se me olvide que vivo en un planeta llamado tierra y que soy un ser de carne, lleno de defectos y de algunas virtudes y una de esas es la humildad la cual veo esfumarse como humo en el espacio de algunas personas con las que normalmente tenemos que relacionarnos más por fuerza que otra cosa; solo le pido a Dios día a día para que pueda conservarla conmigo hasta el último instante en que respire como ser humano, pues sé que la dicha más grande ya me la ha concedido; primero musicalmente grabé con mi hermanito del alma una de las más lindas canciones de mi padre, tengo dos hermosos hijos y una espléndida mujer. Sé que cuando eso suceda habrá más de una persona que cantará a una sirena, ando buscando novia, etc. para entonces viviré en el viento, en el murmullo del mar y en el recuerdo infinito del que ya no morirá y vivirá eternamente en cada corazón del que ame la música del cacique Upar.
Retomando el hilo de nuestros recuerdos musicales debo intentar llegar a él filo de los años donde el trompo, las cometas, los carritos, eran desplazados por la bicicleta ya para entonces habíamos cambiado de sector, pero aun en el mismo barrio. Es ahí donde aparecen unos nuevos amigos “el chato” julio Eduardo Porto Macías, Elmer Suárez Coll Alias “El Dulio”, por aquel parecido al jugador de Fútbol Dulio Miranda, José Luis Simanca (Aún con nosotros en la caja), Koki, el hijo de Belén, y por supuesto el zurdo William Roca el más aventajado musicalmente; para ese entonces sabia sacarle algunas notas a el acordeón.
En ese momento nuestra vida toma un giro y con la adolescencia se manifiestan los primeros versos arrancados del corazón de un primer amor, se empezaba a notar que de la garganta del joven por momentos sonaban bien bonitos los discos del binomio, de Adaníes Díaz y aún de los Hermanos Zuleta quienes a pesar de tener voz fuerte este las interpretaba con mucho sentimiento, tiempos de así fue mi querer, relicario de besos, había que ver que poesía revestía esa maravillosa música.